Protege tus dispositivos

Utilizar la versión más reciente de las aplicaciones y los sistemas operativos ayuda a protegerte de las vulnerabilidades de seguridad. Habilita las actualizaciones automáticas cuando sea posible.

La descarga de una aplicación invita a sus creadores a tu mundo. Instala sólo aplicaciones de empresas que conozcas y en las que confíes. Las aplicaciones reempaquetadas y de terceros tienen un potencial de daño mucho mayor, así que ten cuidado. También debes tener cuidado con los permisos de las aplicaciones. Restringe el acceso a tus contactos, ubicación y fotos de las aplicaciones que necesitan esta información confidencial para funcionar como se desea.

Los programas maliciosos suelen camuflarse en archivos adjuntos de correos electrónicos. Pon atención a mensajes cortos y genéricos como “¡Oye! ¡Mira a este lindo cachorro!” o “¡Esto es gracioso!” de remitentes que no reconoces con direcciones de correo electrónico codificadas o poco convencionales. Los programas también pueden provenir de descargas de sitios web. Si no estás seguro de que el contenido proviene de una fuente confiable, no lo descargues ni hagas clic en ningún enlace.

El software antivirus detecta programas maliciosos y te protege contra ellos. Detecta la mayoría de las cosas, pero no todo. Por lo tanto, permanece atento y habilita las actualizaciones automáticas, ya que cada día se descubren nuevos tipos de virus.

• Configura tu pantalla para que se bloquee automáticamente después de un período breve de inactividad.
• Utiliza PIN y contraseñas seguras. En cuanto más largas sean, más difícil será obtener acceso ilegal a ellas.
• Habilita la autenticación biométrica (huella digital o Face ID) para mayor seguridad y acceso más rápido a su dispositivo.

Esta útil funcionalidad puede ayudarte a localizar tu dispositivo en caso de pérdida o robo. Con suerte, se trata de un accidente y podrás recuperarlo. Si no es el caso, puedes bloquear el dispositivo o vaciarlo de forma remota antes de reemplazarlo.

Si un estafador accede ilegalmente a tu dispositivo, es posible que tengas que vaciarlo. En caso de suceder, te alegrarás de tener una copia de seguridad actual para usar cuando configures tu nuevo dispositivo.

Un atacante puede descubrir fácilmente el nombre de usuario y la contraseña predeterminados que el fabricante establece, por lo que es importante que los cambies tan pronto como instales el equipo. La contraseña que elijas para conectarte a tu red wifi debe ser compleja y diferente del inicio de sesión del administrador.

El encriptado comienza en la configuración del router. Elija la seguridad WPA2 o WPA3 para que cualquier persona que se conecte a tu red wifi necesite una contraseña. Este protocolo también encripta la actividad de los dispositivos conectados. El software antivirus es tu segunda línea de defensa. Elige uno que pueda realizar monitoreos de tu red en tiempo real en busca de amenazas, como dispositivos nuevos y desconocidos.

Una red de invitados permite que otras personas usen tu wifi sin conectarse a sus dispositivos.

Esto puede ayudar a evitar que un pirata informático ingrese a uno de tus dispositivos inteligentes y lo use como atajo a información confidencial en tu computadora portátil o teléfono. Otra forma de ayudar a evitar el acceso es deshabilitar las funciones que no uses, especialmente las que se pueden configurar de forma predeterminada en los dispositivos IoT. El acceso remoto, la conectividad Bluetooth o el control por voz son solo algunas de las funciones que pueden convertirse en posibles puntos de entrada. Deshabilítslas si no las utilizas.

Cambia la contraseña predeterminada en los dispositivos IoT. Habilita la autenticación de dos factores, si está disponible, de modo que cada vez que alguien intente acceder a tu dispositivo inteligente, se le pedirá que proporcione un comprobante de identidad adicional al que solo tú tienes acceso.

Los dispositivos IoT suelen venir con ajustes de privacidad preestablecidos. Revísalos detenidamente y realiza las modificaciones necesarias para adaptarlos a tus necesidades y nivel de comodidad. Si tu hogar sufre un corte de energía, asegúrate de revisar la configuración de tus dispositivos IoT después. A veces, los picos de tensión pueden restablecer tus dispositivos a un estado inseguro.

Siempre compra dispositivos IoT de empresas confiables con un historial de seguridad sólido. Toma el tiempo para revisar su documentación o consulta los sitios web de las empresas a fin de obtener información sobre cómo tomar las medidas de seguridad recomendadas. Asegúrate de registrar los dispositivos IoT con el fabricante y sé proactivo con respecto a las actualizaciones de software y microprogramas. También considera actualizar tus cámaras, termostatos y otros dispositivos inteligentes cuando lleguen modelos más nuevos y seguros. Si decides vender tus dispositivos antiguos, primero asegúrate de eliminar tus datos. Para ello, sigue las instrucciones del fabricante.